Un buen día, Lucrecia cargó en su mochila sus ganas y sus sueños y emprendió decidida su viaje a México para conocer la vecindad que la acompañó en su niñez. Buscaba a la herencia más grande de Roberto Gómez Bolaños, la mítica vecindad del Chavo en Televisa.
Pero no fue posible, la vecindad como la vimos por la tele, ya no existe. La escenografía se armaban en función de cada filmación.
Regresó con algo de frustración y tristeza, pero lo revirtió con ideas, con ganas de hacer y con el impulso de su padre, un innovador que siempre empujó a sus hijas a desafiarse, a ir más allá.
Así nació Sale y Vale, la única réplica de la vecindad, que hoy administran en Salta, Lucrecia y Natalia Corrales.
Es una réplica casi exacta de la vecindad de Televisa, con disfraces de todos los talles y todos los personajes para que quien vaya, cumpla el sueño de ser uno de ellos por un ratito.
“Lo bueno es que te encontrás con muchos fanáticos, hay que verlos son adultos que vuelven a ser chicos de verdad. Conocen todos los diálogos. Es que se trata de personajes que trascienden generaciones, cada uno tiene una nota particular”, comentó Natalia.
“Es impresionante, porque aunque saben de memoria partes del libreto y hasta capítulos enteros se ríen igual, como si fuera la primera vez que los oyen”, acotó Lucrecia.
Ya alquilaron el salón para festejar cumpleaños, reuniones e incluso conferencias y la proyección del emprendimiento es impresionante a tan solo dos meses de su inauguración.
Pasaron por el barril del Chavo, adultos y niños, grupos de amigos y familias enteras e incluso grupos de turistas que visitaban la ciudad y ya postulan a la vecindad como un atractivo más.
“Los grandes van con los chicos, primero no se quieren disfrazar, pero si uno se prueba el vestuario de un personaje; se produce el efecto contagio. Los abuelos son hermosos, se emocionan porque no se imaginaron nunca vivir algo así. Algunos llegan serios, no saben qué los espera, pero bajan al café con los ojos brillosos y la sonrisa de oreja a oreja. La magia de este lugar no falla”, garantiza Natalia.
Si sos un nostalgioso de la serie y querés pasar un momento inolvidable con la sonrisa dibujada en la cara, la invitación está hecha. La vecindad del Chavo está en Ayacucho 740, barrio 25 de Mayo.
El precio para entrar, vestirse, jugar, divertirse y disfrutar con amigos, es de 100 pesos para adultos y 70 para niños, e incluye desayuno o merienda.
Los buscás en Facebook como Sale y Vale Salta o reservá en los teléfonos 3874067855 o 3874086906.
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