La madrugada de ayer fue muy violenta en el Norte salteño. Grupos de bagayeros y de gendarmes se enfrentaron en proximidades de la localidad de Aguas Blancas, y al cierre de esta edición el balance era de una persona fallecida, tres heridos graves y la ruta nacional 50 cortada por manifestantes.
En un escenario tan cargado de tensión, resuenan los anuncios de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, quien la semana pasada en el lanzamiento del Plan Güemes (concebido para enfrentar el narcotráfico y el contrabando) adelantó que el Gobierno Nacional trabajaba en un proyecto de "régimen simplificado" para formalizar el comercio en la frontera
"El que pasa de forma legal estará en regla. Ahora tenemos la autoridad de aplicación, y las actividades ilegales tendrán consecuencias" advirtió la ministra, pero sin brindar mayores detalles ni precisiones acerca de cómo se implementará la iniciativa.
El comercio local no tiene intenciones de quedar como espectador frente al ingreso descontrolado de mercadería que en los últimos meses ha puesto en jaque a varios negocios de ciudades como Orán y Tartagal. “Estamos trabajando siempre en el comercio porque entendemos que la responsabilidad es mayúscula y va más allá de las ventas. Hay que evitar el comercio ilegal porque no sólo perjudica al comercio que está en la formalidad, sino que disminuye el ingreso para Seguridad, para Educación y propicia otros delitos”, observó el Gustavo Herrera, presidente de la Cámara de Comercio e Industria.
Respecto de la posibilidad de avanzar hacia un régimen simplificado, Herrera fue cauto y llamó a sus colegas a “esperar, porque esta no es una lucha nueva, sino que lleva años y siempre la frontera fue un tema. Las acciones en este sentido, para el combate del tráfico nunca son negativas, pero es el tiempo es el que muestra la efectividad o no de estas medidas”, analizó.
Atender la problemática
El flamante secretario de Comercio e Industria de Salta, Rodrigo Monzo, comentó a IN Salta que se mantiene en diálogo con comerciantes de Tartagal y Orán y reflexionó que “es un tema que también debemos atender. Así como atendemos el tema de seguridad, debemos atender el comercio porque hoy nuestros comerciantes del interior de la provincia no la están pasando del todo bien. La ministra Bullrich había anunciado un plan de regularización para que el comercio se pueda legalizar. Esta es una de muchas ideas que están dando vuelta y que entendemos que debemos trabajar para que se concrete”, expresó.
Por su parte el ministro de Producción y Desarrollo Sustentable, Martín de los Ríos, agregó que “en Aguas Blancas, en la frontera, con la oleada de gente que va a comprar, mucho puesto que va a vender, se está afectando al comercio del Norte. Claro que conforme se modifica el tipo de cambio se hace más competitivo uno u otro lado de la frontera en el precio final. Hoy toca que la situación de Bolivia está generando conveniencia de ingreso de productos cuyo origen no siempre es el legal. Estamos trabajando a nivel nacional, con la Secretaría de Comercio de la Nación, a cargo de Pablo Levine, y con el Ministerio de Justicia, para trabajar en un régimen simplificado para áreas de frontera que tenemos que depurar y que tenemos que aceptar y que tenemos que instrumentar para que pueda formalizarse mucho de ese intercambio comercial”, advirtió.
“Por supuesto, habrá otros que enmarcados en la ilegalidad deberemos combatirlo con las nuevas herramientas y con los nuevos elementos para contribuir a la lucha contra el narcotráfico y contra el contrabando que hoy se han instalado”, lamentó.
“Claramente esa situación en una frontera seca de más de 200 kilómetros que tiene nuestra provincia, la mejor manera de erradicarla es generando condiciones que permitan formalizarse a esos microcomerciantes y que el comercio se haga en los departamentos de frontera. Nosotros necesitamos que ese comerciante de Orán, de Tartagal, de Aguas Blancas, de Salvador Maza, que honra sus obligaciones provinciales y nacionales, no sea víctima de la competencia desleal, para lo cual tenemos que simplificarle a todos el esquema, no castigar al formal y no controlar el ilegal”, concluyó.