Todo el campo acusa una situación compleja pues los tiempos no son fáciles. La producción de leche, entonces, no es la excepción de la fragilidad económica que afecta a todos los sectores y que los obliga a producir con casi nulas posibilidades de recuperar las inversiones. Por esto advierten, aunque todos lo saben, que los precios seguirán subiendo.
“Los insumos para la alimentación de las vacas los paga el tambero pero no los está recuperando porque el aumento de los precios de los commodities, maíz, soja, granos, los insumos para sembrar, sumado a la inflación, hacen que no se pueda recuperar lo invertido”, explicó el gerente general de la Cooperativa de Tamberos de Salta (Cosalta), Gustavo Peretti a IN Salta.
El directivo dijo que en Salta hay 30 tamberos. “Para ponerle el precio real a un litro de leche hay dispersión, ese es un tema que termina dependiendo de cada tambo y sus circunstancias de producción. Hay tambos grandes con más capacidad de acopio y hay tambos chicos y medianos que la reman en el día a día. Estos últimos son los que están produciendo ya no para subsistir, sino a pérdida y todo para no perder el mercado. Esto es algo que no se puede sostener mucho más en el tiempo”, lamentó.
Peretti aclaró, sin embargo, que la producción de leche no se vio afectada y se mantiene sin alteraciones en sus índices anuales y mensuales. "Estos varían de entre 90 a 120 mil litros diarios, alterando la curva solo por cuestiones naturales en épocas de parición. Esto es entre marzo y abril (con la curva más baja) y septiembre y octubre con los valores más altos".