Hoy es una mujer empoderada, desde otro lugar mira a la niña de 13 años que se convertía en mujer y que no encajaba en los estándares clásicos para sus primeras incursiones por la lencería femenina.
En diálogo con IN Salta recuerda estas primeras etapas de su desarrollo y cómo la marcó el no poder encontrar ropa interior a su medida.
“Desde los 13 años, con un busto totalmente atípico, me costó encontrar ropa interior que me gustara y se adaptara a mi cuerpo”, recordó. Con estudios en marketing, nutrición y un gran amor por la moda, lanzó en octubre Chulenka Intimates, aunque no fue su primera incursión en la moda y la lencería femenina que ya se dedicaba a confeccionar.
“Hay mujeres con mucha espalda, poco busco, o mucho glúteo y poca cadera, y lo que estoy haciendo es para que nadie tenga que vivir lo que viví yo”, comentó.
Guadalupe trabaja con una tabla promedio estándar, pero sabe que cada mujer es única y su cuerpo es único, por eso cada prenda se confecciona a medida.
“Chulenka surgió después de muchos años de no encontrar talles, de que la sociedad te imponga que tu cuerpo tiene que ser así y si no sos así, entonces sos vos la que está mal “. La otra opción es resignarse a encontrar lo que te entre y adaptarse a esto. No es así, nadie debería sufrir porque su cuerpo es como es”, desafió.
Cada peso que ingresa es reinvertido en su sueño para que Chulenka Intimates pueda llegar a cada rincón de Salta y al país, lo cual ya está logrando puesto que recibe pedidos y hace envíos a toda Argentina.
Mucha perseverancia, ambición y ganas son las que convirtieron a Chulenka en el emprendimiento de renombre que es hoy. Desafiando estereotipos de cuerpos perfectos, Guadalupe apuesta a un nuevo concepto de sensualidad y aceptación.