Hace exactamente una década desde que WhatsApp salió al mercado. Diez años en los que la aplicación no ha dejado de evolucionar y ofrecer mayores posibilidades a sus usuarios. Creada por Jan Koum y Brian Acton, esta herramienta de mensajería nació en un principio como una agenda inteligente que permitía compartir estados con los contactos que tuviésemos guardados en la agenda de nuestro celular. Con el tiempo, esta agenda dio un salto cualitativo y, siguiendo el modelo del chat interno ideado por BlackBerry, se convirtió en un espacio de mensajería a través de internet que permite a sus usuarios enviar textos, imágenes, vídeos, audios e incluso realizar videollamadas con otros usuarios de manera totalmente gratuita e independientemente del país en el que se encuentren.
El éxito de esta herramienta fue tal, que en 2014 Facebook decidió comprarla por la friolera de US$ 19.000 millones. El importante desembolso hizo pensar que WhatsApp dejaría de ser gratuita o que se incluirían algunas modificaciones en su funcionamiento con el objetivo de monetizar su empleo. Sin embargo, nada de ello ocurrió, hasta ahora.
Los más de 1.500 millones de usuarios que cuentan con la aplicación instalada en sus smartphones tendrán que convivir a partir del próximo año con publicidad dentro de la propia app. Así lo ha anunciado la compañía en el Facebook Marketing Summit 2019 (FMS19) celebrado estos días en la ciudad holandesa de Rotterdam. La noticia no ha pillado a nadie por sorpresa, desde que Mark Zuckenberg se hizo con la plataforma hace seis años, ya se venía rumoreando con que en algún momento los anuncios llegarían a la plataforma, del mismo modo que llegaron a Facebook y a Instagram. Es más, el propio vicepresidente de Facebook, Chris Daniels, llegó a confirmarlo en 2018 pero no adelantó una fecha concreta. Ahora, sabemos que el cambio tan temido por los usuarios entrará en vigor en 2020.
Una de las mayores ventajas que los usuarios señalan de WhatsApp es que se trata de una aplicación de uso muy intuitivo y sencillo, algo que previsiblemente cambiará con la incorporación de banners publicitarios ya que éstos suelen dificultar el correcto funcionamiento de la aplicación en términos de comodidad. Por otra parte, los anuncios en las plataformas de internet suelen verse como una falla en la seguridad de la propia herramienta digital, ya que se suele asociar estos anuncios con timos. Esta no es una cuestión baladí, ya que los usuarios están cada vez más preocupados por la seguridad de sus celulares y, en concreto, por la seguridad de todas las actividades que se llevan a cabo con ellos. Es por ello por lo que las bancas electrónicas emplean ahora patrones de reconocimiento como la huella dactilar para acceder a ellas o el motivo de que algunas aplicaciones que manejan dinero de sus usuarios, como pueda ser PokerStars, pongan a disposición de sus usuarios diversos mecanismos para proteger sus cuentas.
Conocedores de la reticencia del público a los anuncios en las aplicaciones móviles, la compañía ha afirmado que, por el momento, estos anuncios tan solo se presentarán en el apartado de “Estados”. De esta forma, y siguiendo el patrón presente en Instagram Stories, los usuarios verán la publicidad al navegar por los estados de sus contactos. Es decir, que estos anuncios no saldrán en las conversaciones, sino solo si accedemos específicamente al apartado de “Estados”, en donde podremos saltarlos o acceder a la empresa anunciante haciendo clic en la imagen. Con esta acción, Facebook espera monetizar los casi 500 millones de usuarios que emplean esta función de la aplicación a diario.
Además de este anuncio, la compañía también ha aprovechado el FMS19 para dar a conocer su intención de agrupar en una sola plataforma Facebook Messenger, Instagram Direct y WhatsApp, con el objetivo de mejorar la experiencia del usuario. De esta forma, las tres aplicaciones enfocadas a la mensajería instantánea continuarían funcionando de modo independiente, pero permitirían que, por ejemplo, un usuario de Facebook le enviase un mensaje a otro de WhatsApp a pesar de no contar con una cuenta en esta segunda app. Con todo, desde Facebook han informado de que todavía quedan algunas cuestiones por pulir, especialmente relacionadas con la privacidad de los usuarios, por lo que se estima que esta nueva plataforma no llegue hasta finales de año o principios de 2020.