Los cañeros de Salta y Jujuy cuentan pérdidas por $ 1.500 millones, alrededor del 50% de la producción, por culpa de la sequía y de una enfermedad que afecta a las plantas. La situación del sector ahora es tratado por la Mesa Regional de la Producción Azucarera que se conformó especialmente para analizar medidas que ayuden a los productores a mantener la actividad. El daño se hará más palpable en la zafra 2022 que iniciaría en mayo.
La Unión de Cañeros Independientes de Jujuy y Salta advierte que la situación es complicada y crítica, por lo que se decidió solicitar ayuda a los gobiernos de ambas provincias. El titular de la institución, César Macina, indicó a IN Salta que esperan soluciones a corto, mediano y largo plazo que se ajusten a la realidad de los productores.
En este punto, el dirigente hizo mención a financiamiento a través de créditos para la renovación de cañaverales con tasas bajas y devolución de acuerdo a los ciclos de la producción, la desgravación del impuesto a los ingresos brutos, la condonación del impuesto inmobiliario y del canon de riego, entre otros.
La Mesa está integrada por las carteras de Producción de los Gobiernos de Salta y de Jujuy, representantes de la Unión de Cañeros Independientes y de los ingenios azucareros. En la última reunión decidieron la visita a los campos para medir las pérdidas denunciadas.
“A la sequía se suma la RCD, una enfermedad que no deja crecer las plantas y que se va multiplicando en el campo por lo que debemos hacer tratamiento técnico. Cuando nos toque renovar el cañaveral no vamos a tener plantas”, indicó Macina, al tiempo que señaló que son “bastante” los campos afectados en ambas provincias.
La caña tiene dos fechas de plantación, en septiembre y en marzo. “Posiblemente la de marzo sea mejor porque esperamos las lluvias para entonces”, indicó el dirigente para mencionar que hay unos 130 productores, de los cuales 80 están asociados a la Unión. En Salta la producción se concentra en General Güemes y en Orán.