IN Salta consultó al ministro de Economía de la Provincia, Roberto Dib Ashur, y a Álvaro Pérez, economista y director de la consultora Finex, sobre el acuerdo cerrado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El funcionario lo consideró importante y el especialista en finanzas fue crítico.
“Es muy importante que la Argentina pueda llegar a un acuerdo con el Fondo Internacional”, pero aclaró que debe ser en términos “que sean posibles de cumplir, que nos de las posibilidades de crecimiento y las posibilidades de poder pagarlo. Las condiciones del Fondo Monetario Internacional son muy duras de poder cumplir y de afrontar esa deuda”.
“Exactamente lo que se está discutiendo es que no sea un ajuste, sino que se la posibilidad de crecimiento de la economía, que le de los recursos necesarios para que uno lo pueda afrontar con el presupuesto sin tener que ajustar”, comentó. En este sentido, el funcionario manifestó su coincidencia con el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, con respecto a su visión de “apostar a la producción y al crecimiento, es que tenemos que seguir ayudando a la economía''.
Tuvimos tres años malos: en 2018 cayó la economía, en 2019 cayó la economía, en 2020 se derrumbó la economía y en 2021 empezamos a recuperar. En esta línea, tanto la Nación como la Provincia –señaló- han decidido llevar adelante un conjunto de medidas estratégicas de reactivación económica. “Buscamos el desarrollo de las pymes porque creemos que la salida es con más actividad, con más ayuda, con más acompañamiento”, concluyó.
Una carta de pura intención
Para Pérez, en cambio, “el acuerdo era una oportunidad de hacer una declaración política”. “El pago se tenía que hacer, era ilógico no pagar, pero se perdió este momento de hacer una declaración política frente al Fondo y no pagar callados, porque esto hace dos años que estaba pasando y no era para juntarse y arreglar en 10 minutos”, cuestionó.
“El Fondo ya dijo que sí van a bajar los subsidios y el Gobierno anticipó que se van acumular reservas, todo parece ser una manifestación de deseo porque en finanzas vos podés tener la voluntad de que algo pase, pero la realidad es que si vas a correr 5 kilómetros en un partido de fútbol no lo vas a ganar. Para ganar un partido todos los jugadores tienen que correr 12 kilómetros y aún así pueden perder, pero si corrés 5 sabés que vas a perder”, ejemplificó.
En este sentido cuestionó que “no tenemos un plan, nos olvidamos del plan plurianual, por lo tanto esto es una declaración, es un principio de entendimiento en un país en el que no sabés qué va a pasar la semana que viene”, señaló.
El economista le atribuyó la falta de certidumbre a varios factores, en el que la pandemia de Covid jugó un rol trascendental. “Es cierto que nos sorprendió la pandemia, pero nos sorprendió sin un plan y entonces, mientras el mundo armaba los planes económicos para salir de esta crisis sanitaria y económica, el Gobierno se debate en luchas internas pegando volantazos que no dan certeza a inversores ni acreedores y ojo que cuando digo acreedores somos todos, todos nosotros porque la plata de los argentinos de ANSES está en bonos argentinos, entonces no todos los inversores hablan en inglés, algunos hablan en quechua, o guaraní”, advirtió.