Las deudas y compromiso económicos de los últimos dos meses de gestión del ex intendente Gustavo Sáenz en la Municipalidad de Salta serán detenidamente analizadas por una comisión, que se tomará al menos 60 días para elaborar un dictamen antes de pagar. Así lo confirmó ayer el flamante secretario de Economía y Hacienda de la Municipalidad, Daniel Amador, quien de esa manera confirmó un rumor que había llegado a oídos de proveedores y contratistas de la comuna.
Aunque la decisión se tomó aún durante la gestión de su predecesor, Emilio Savoy, Amador confirmó que la comuna tomo la decisión de analizar una por una las facturas a pagar por la Municipalidad, especialmente las presentadas en los dos últimos meses de gestión del hoy gobernador Gustavo Sáenz.
“¿Se sospecha de alguna irregularidad o ilícito?”, consultó IN Salta al funcionario. Pero Amador negó esa posibilidad, y argumentó que el cambio de gestión les impone la realización de una auditoría para verificar si cada pago corresponde o no. Y anticipó que cumplido el plazo de 60 días se elaborará un cronograma de pagos para cumplir con todas las obligaciones que quedaron pendientes, aunque no precisó los montos involucrados. Solo aclaró que se trata de deudas con empresas contratistas, proveedores comunes y medios de comunicación.
Por otra parte, el secretario de Economía y Hacienda informó que se puso en marcha una fuerte política de contención del gasto que no esté relacionado con la resolución de los problemas de los vecinos. En ese sentido detalló que se cortó el pago de celulares de alrededor del 60 % de la planta de empleados municipales, y que se aplicarán medidas similares con el uso de vehículos oficiales. Estamos siendo austeros con el gasto, priorizando sólo aquello que tiene relación con el vecino”, sentenció.