Las dificultades económicas agravadas por la cuarentena obligatoria por el coronavirus movilizaron a un grupo de empresas del sector alimentario salteño, que se propusieron asegurar el abastecimiento de comida a comedores y merenderos de la provincia.
La iniciativa fue liderada por la empresa Molinos San Bernardo que, con productores de la zona de Metán hizo una donación de bolsas de harina, locrillo blanco y sémola amarilla. En total se entregaron ya 50 bolsas de harina fina de 40 kilos cada una, 200 de sémola amarilla de 25 kilos y 100 bolsas de locrillo blanco de 20 kilos. La donación consistirá en un total de 20 toneladas de alimentos; el faltante llegará esta semana.
La donación se hizo a través de la secretaría de Industria, Comercio y Empleo que a su vez intercedió para que los alimentos lleguen al ministerio de Desarrollo Social. Estos quedarán en un depósito puesto a disposición por la Asociación Parque Industrial y gestionado también por la mencionada secretaría del ministerio de Producción y Desarrollo Sustentable.
Los alimentos serán entregados a comedores y merenderos de Salta que aún en momentos de pandemia no han detenido su tarea y que incluso vieron que la demanda aumentó por el aislamiento social preventivo y obligatorio impuesto por el Gobierno Nacional. Así lo hicieron saber referentes de movimientos sociales a la ministra en un reciente encuentro para coordinar acciones barriales, especialmente las referidas a la alimentación en contexto de pandemia.