Con la presencia de David Lacroze, presidente de la Mesa Nacional de Ganados y Carnes, deliberó el pasado viernes en Salta, en el marco de la Expo Rural, la Mesa de Carnes de Salta. Allí un nutrido grupo de productores analizó el presente y el futuro del negocio ganadero, y las perspectivas puntuales para Salta y la región.
La actividad arrancó con la disertación “El rompecabezas del negocio ganadero”, a cargo del ingeniero agrónomo pampeano Fermín Torroba, técnico de AACREA. El profesional repasó cómo se planea poner en marcha el nuevo sistema de tipificación, ya que el actual está vigente desde la década del 70 y urge avanzar hacia esos cambios.
A la hora de analizar la coyuntura, el profesional explicó que hace tres años que el precio de novillo cae, ya que no le ganan a la inflación. “Estamos en el peor momento desde el 2010 hasta acá”, afirmó; y agregó que “si analizamos el precio de invernada frente a la inflación, está bastante parecido, aunque por momentos está peor que el novillo”.
Con respecto al dólar, señaló que “hoy estamos más competitivos frente a otros países en novillos de exportación. ¿Cómo venimos? 400 mil toneladas de exportación, lo que duplica lo que veníamos haciendo en el período 2012-2016”.
Torroba comentó que “la buena noticia es que exportamos; lo complicado es a quién le vendemos”. Según detalló, “el 50% va a China, con un 60 % de lo que exportamos a un precio bajo. Solo un pequeño porcentaje llega a los 9.000 dólares la tonelada”.
El especialista mencionó que actualmente “tenemos un 11% más de faena que el año anterior. Desde 2009 que no faenábamos lo que este año promete al cierre. El dato no tan bueno, ya que estamos faenando un 9 % más de vacas y un 22% más de vaquillonas. Esto lleva a que el mercado interno esté saturado de carne, y la competencia es solo por precio”.
Respecto de lo que pasa en el resto del mundo, precisó que “mueve 9 millones de toneladas de carne vacuna. Los países que lideran las exportaciones son Brasil e India en volumen; y EEUU y Australia en calidad”. Y agregó que “Japón, Corea y parte de China están dispuestos a pagar por calidad; pero Argentina tiene trabas sanitarias y arancelarias. Esto se resuelve con trabajo sostenido a mediano plazo; es algo que se puede conseguir”.
De cara al futuro, mencionó que “China es aparentemente la salvación. Va a duplicar su consumo en los próximos años, ya que van a pasar de consumir 2 kilos a 4 kilos por habitante (son 1.300 millones de habitantes)”. Pero volviendo a la Argentina advirtió que “estamos faenando más novillos y novillitos de los que tenemos, y esto es peligroso para la producción. Este año se están faenando los terneros que deberían pasar para el año que viene y esto provoca variaciones de precios de un año a otro. Además, en el stock de vaquillonas de este año hemos caído en 600 mil cabezas. Mientras tanto, la tasa de cría de terneros es baja”.
A la hora de las conclusiones, Torroba anunció que el nuevo sistema de tipificación dará sus primeros pasos en enero, y en su opinión “debe unir lo que los productores hacen con lo que los consumidores exigen”.
También sostuvo que “el protocolo de China es a largo plazo”, e instó a los productores a “adaptarse como sea, porque ellos son el futuro. No estamos acostumbrados a hacerlo, pero hay que hacer lo que los consumidores nos pidan”.
“Lo bueno es que el mundo está ávido de carne y se está trabajando en el ordenamiento de la cadena, los protocolos y el marketing de la carne. Lo malo, que tenemos una alta dependencia de los niveles de cambio; en términos sanitarios los protocolos llevan tiempo; y hay los altos aranceles para entrar en mercados de calidad”, concluyó.