La primera preocupación que recibió Juan Lucero cuando asumió la presidencia de la Cámara Hotelera de Salta fue el aumento del 100% de las tarifas de la energía eléctrica y gas. En medio de las gestiones para atender los planteos del sector, el empresario también inició el trabajo para duplicar la cantidad de afiliados.
Lucero anticipó que seguirá con la línea de acción que llevaba adelante la anterior comisión directiva. A IN Salta anticipó que “los pilares para trabajar serán sumar a la Cámara más asociados de los sectores hotelero y gastronómico de Salta. Aquí encontrarán un lugar para trabajar en cuestiones que nos preocupan y también en aquellas cosas que nos salen bien, conquistas que tenemos como entidad para los empresarios”.
El objetivo central para 2023 es pasar a las 500 firmas adheridas (hasta el momento tienen 250 asociados). “La propuesta no se centrará en la ciudad, que ya en sí es muy buen destino hotelero, sino que nos extenderemos a nuestros colegas del interior, donde también hay una muy buena oferta hotelera y gastronómica que necesitamos traccionar”, aseguró.
Preocupación
El nuevo presidente de la entidad ya recibió las inquietudes de los afiliados por las tarifas de los servicios de energía y de gas.
“Lo primero que me expresaron los socios es su preocupación con respecto al tema tarifario. Ya tuvimos una reunión con el Ente Regulador, en el Ministerio de Turismo y referentes de Edesa. Les expresamos en una nota que el sector no está para tolerar ningún tipo de aumentos, mucho menos si antes tenían una factura de $ 100.000 y ahora les llegó a $ 200.000 de un mes a otro”, reclamó.
Dijo “tampoco entendemos la nueva recategorización de las tarifas, por lo cual le pedimos a Edesa que disponga de un personal permanente que nos ayude a interpretar estos cuadros que para nosotros son impagables”.
“Estamos viendo todos los caminos para ahorrar de alguna manera porque no podemos enfrentar una suba que, además, no se puede trasladar a las cartas de a los costos de habitación. Se habló de tarifas diferenciales para hotelería y gastronomía durante la noche, subsidios para el sector y hasta de una especie de compensación ya que uno tiene contratados una gran cantidad de kilowatts que a veces no se ocupan, pero son situaciones que cuando a nivel nacional se toma la decisión es muy difícil que se reviertan”, lamentó.