La Cámara de Diputados de Salta recibió al ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo, Ricardo Villada, y a su equipo técnico para analizar el proyecto de ley que crea la Fiduciaria de Salta (S.A.U.) y el Fondo de Garantías de Salta (FOGASAL), una herramienta que promete ampliar el acceso al financiamiento para miles de micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) de la provincia.
Durante el encuentro, los funcionarios detallaron los alcances del proyecto, cuyo objetivo es superar la principal barrera que enfrentan las MiPyMEs: la falta de garantías suficientes para acceder a créditos productivos en el sistema financiero.
El FOGASAL se constituirá como un fideicomiso autárquico, con patrimonio separado e inembargable, destinado a servir como aval crediticio para personas y empresas con actividad productiva, comercial o de servicios. No otorgará préstamos directamente, sino que funcionará como respaldo para que los bancos ofrezcan mejores tasas y montos de financiamiento.
El fondo contará con una capitalización inicial de $ 2.000 millones, aportados en partes iguales por la Provincia y el Consejo Federal de Inversiones (CFI), y un posible refuerzo adicional de $1.000 millones del CFI. Gracias al apalancamiento autorizado por el Banco Central, podrá garantizar hasta $ 12.000 millones en créditos, generando un impacto financiero significativo en la economía provincial.
Un impulso a la inclusión financiera
Durante la presentación, el ministro Villada destacó que el proyecto “es un puente hacia el crecimiento, una herramienta que cambia las reglas del juego para empresarios y emprendedores salteños”. Subrayó además que Salta se sumará a más de la mitad de las provincias del país que ya cuentan con fondos de garantía activos y exitosos.
En la misma línea, el secretario de Industria y Comercio, Rodrigo Monzo, sostuvo que el FOGASAL será “ese empujón que las PyMEs necesitan para dar el salto de crecimiento”, y agregó que el fondo busca no solo acompañar con avales, sino también fortalecer la transformación productiva en sectores clave de la economía local.
Por su parte, Natalia Suppa, coordinadora de Administración Financiera, remarcó que la territorialidad del fondo permitirá atender de forma directa las necesidades de las empresas salteñas, con una gestión más ágil y cercana que los programas nacionales.
Un desafío estructural
Los legisladores presentes coincidieron en que el proyecto responde a una realidad concreta: el 97% de las MiPyMEs salteñas no accede actualmente a garantías formales, lo que limita su competitividad y crecimiento. En este sentido, la creación del FOGASAL se percibe como una decisión estratégica para fortalecer la producción y el empleo en la provincia.
El esquema incluirá además programas de capacitación y asistencia técnica para mejorar la gestión financiera de las empresas beneficiarias, asegurando transparencia y eficiencia en la operatoria, bajo la supervisión del Banco Central de la República Argentina.
Con esta propuesta, Salta busca consolidar un modelo de inclusión financiera y desarrollo productivo, donde el crédito deje de ser una barrera y se convierta en una herramienta de expansión para los emprendedores y empresarios locales.