Kaiser fue el primero en hablar y ante un auditorio repleto de hombres y mujeres de negocios se centró en explicar "el rol fundamental de los empresarios en justificar las medidas populistas".
En el caso de Chile -hasta ahora- la élite empresarial no ha acompañado propuestas populistas o demagógicas. "Pero hay que saber que los empresarios son los principales responsables para evitar el populismo y también por eso- tienen una responsabilidad central cuando el populismo avanza, como sucedió aquí en Argentina"
El abogado dijo que el año pasado se había reunido con los tres principales candidatos a presidente y afirmó que "si en Argentina no ganaba Macri, esto hubiera sido una catástrofe, no sólo para su país sino para toda la región. Espero que ahora tengan la valentía para poder reparar 12 años de destrucción económica y corrupción moral", disparó sin pelos en la lengua.
Con estilo similar, Álvarez sostuvo que los latinoamericanos debemos empezar a hacernos cargo de nosotros mismos ."Si seguimos culpando a los españoles o a los yanquis por nuestras desgracias nos irá muy mal", sostuvo.
Aseguró que nunca hay que esperar que las masas estén listas para un cambio. "Son las élites las que deben hacerlo para poder traspasarlos luego a las reglas de juego ¿Están las élites en América Latina listas para vivir bajo el imperio de la ley?", se preguntó.
También puso el ojo en los empresarios "son buenos para pensar el largo plazo pero en su empresa, si se trata del país no se concentran en eso sino en el corto plazo", afirmó.
Y concluyó: “Por cada Chávez, por cada Castro, por cada Kirchner habrá un grupo que se beneficiará a pero las consecuencias las paga la mayoría". (GL)