Simón Pérez Alsina asumió en la Cámara de Minería de Salta en medio de polémicas por las regalías, intentos de nacionalización y de intervención del Estado nacional en los proyectos que, de acuerdo a la Constitución, son de jurisdicción provincial. El contexto también está marcado por el auge que especialmente está teniendo el litio en la región, lo que la convierte en blanco de inversiones de compañías multinacionales.
El empresario es abogado especialista en derecho minero, representante de Ganfeng Litio Argentina. Asumió secundado por José de Castro Alem, de la empresa Argentum Lithium, quien ocupa la vicepresidencia de la institución. Reemplazó en el cargo a Carlos Ramos de Corriente Argentina (First Quantum - Taca Taca) quien continúa en la comisión directiva como vocal 1.
IN Salta entrevistó al dirigente quien destacó el aporte de la minería a la economía provincial y nacional. Dijo además que cualquier intento de intervención por parte de Nación asusta y que si las Provincia quieren más dinero deberían discutir con el Gobierno central la redistribución de los ingresos.
Le toca asumir en un contexto complejo de la economía del país, ¿Cuáles van a ser sus metas?
Es así, tenemos un panorama bastante complicado pero la minería viene a eso, a ayudar a exportar y producir, que es lo que necesita el país para poder salir de la situación en la que estamos. Claramente el problema es la falta de dólares y para solucionarlo se necesita exportar más y generar más trabajo genuino que venga del sector privado y para que eso ocurra necesitamos desahogar al sector. Las metas que tenemos apuntan a seguir trabajando, que los proyectos se sigan desarrollando.
Se desató una polémica tras las declaraciones del gobernador Gustavo Sáenz con respecto a las regalías mineras que quedan para la Provincia. ¿Cuál es su opinión?
Creo que hay que ver el contexto completo. Vi la entrevista con (el periodista Alejandro) Fantino y se venía hablando del federalismo y lo perjudicadas que se ven las Provincias por Nación. Hablaban de eso y de la carga impositiva en general.
En el video que circuló por las redes sale la parte en la que solo se habla de las regalías. Yo aclaré, como también se aclara en la entrevista, que no solo se pagan regalías sino también ganancias, retenciones, ingresos brutos, IVA, cargas sociales, lo que nos deja una carga impositiva altísima cercana al 50%. No hay que seguir subiendo impuestos a la Argentina, para ningún sector porque se sigue ahogando al sector privado para financiar al gasto público.
¿Sigue siendo Argentina un horizonte interesante para la inversión?
Sí, Argentina y sobre todo Salta vienen manteniendo una interesante política de Estado a largo plazo que es lo no tenemos que violar. Si uno cambia las reglas vamos a dejar de ser competitivos. Entiendo que vamos a seguir con las mismas reglas y Salta sobre todo va a seguir respetando la seguridad jurídica que viene manteniendo hace muchos años.
¿Qué repercusiones tienen en la inversión, en los proyectos, los intentos de nacionalizar el litio?
Cualquier intento de intervención del Estado asusta. El litio ya se exporta industrializado. Nosotros exportamos carbonato de litio en su grado máximo de pureza que es el máximo de industrialización en que lo podemos exportar. Lo de industrializar es un relato que se hace desde Buenos Aires.
Pueden ir al Parque Industrial de General Güemes para ver cómo están trabajando las plantas. Es lo que hablábamos antes, de la falta de federalismo. Cuando algo sale bien, la Nación lo quiere y lo más triste es que algunas provincias están apoyando eso. Hay que dejar de intervenir, dejar de poner piedras al sector privado porque eso lo que hace es ahuyentar las inversiones.
Salta, Catamarca y Jujuy, hablando del litio, también buscan participar de las ganancias…
Por supuesto, pero el Estado debe ir por su camino y las empresas por su camino. Si lo que quieren las Provincias es más dinero deberían discutir con Nación la redistribución de los ingresos.