Una fábrica que operaba en forma clandestina en San Luis, en la zona sur de la ciudad, fue clausurada ayer por inspectores de la Subsecretaría de Control Comercial, a través del área de Salubridad del Consumo. El operativo fue activado luego de recibir una denuncia, a través de la aplicación web Salta Activa.
La actividad se desarrollaba en una vivienda ubicada en Cerro Incahuasi y Nevado de Llullaillaco. La Municipalidad trabajó de manera conjunta con la Policía de San Luis y la División Trata de Personas de la Policía de la Provincia de Salta.
Al ingresar al lugar se encontró maquinaria para la elaboración de garrapiñadas, palitos salados, maní y papas fritas -todo en condiciones insalubres- y se corroboró la presencia de personas trabajando en forma clandestina.
Durante el procedimiento se constató que el lugar no poseía habilitación, certificados de manipulación ni cumplía con las normas de higiene y salud.
“Días atrás fuimos alertados sobre un lugar en donde elaboraban garrapiñadas, papas fritas y otros productos clandestinamente”, indicó el subsecretario de Control Comercial, Nicolás Avellaneda. Y agregó que “los productos eran vendidos en establecimientos educativos y locales de distintas zonas. Al realizar un seguimiento se logró verificar, ingresar y clausurar el lugar”, finalizó.