La minera Mansfield, que explota el yacimiento de oro Lindero, se vio envuelta en las últimas horas en un mar de rumores que advertían sobre el contagio masivo de trabajadores con COVID-19. Sin embargo, a través de un comunicado oficial, la empresa aclaró la situación y confirmó que luego de realizar test de PCR a la totalidad del personal que se encontraba trabajando en la mina se detectaron sólo dos casos positivos, que fueron trasladados a Salta para su atención y seguimiento. Además, la firma anticipó que realizará un nuevo test a la totalidad del personal para minimizar las posibilidades de contagio.
El comunicado de la empresa señala que el pasado miércoles 14, “uno de nuestros colaboradores presentó un cuadro con síntomas compatibles con el virus COVID-19 en el campamento Mina Lindero. Ante esta situación se le realizó el análisis PCR y su evacuación”. Como el resultado del test fue positivo, “de inmediato se activó el plan de Bioseguridad”, que incluyó el testeo masivo de los 454 trabajadores que se encontraban en la mina (que se realizó el jueves 15 y viernes 16) y el aislamiento y monitoreo médico de los obreros con síntomas.
Como resultado del testeo masivo se identificaron otros dos trabajadores con COVID-19, que fueron trasladados a Salta para su aislamiento, en el que evolucionan favorablemente bajo la supervisión del Servicio Médico de la empresa. Además, Mansfield anticipó que durante esta semana se realizará un segundo hisopado a la totalidad de los trabajadores que se encuentran en el campamento.
La noticia de los casos positivos de COVID-19 en la mina provocó sorpresa no solo en Mansfield, sino en todas las empresas mineras que operan en la Puna, ya que todas aplican el mismo Protocolo de Bioseguridad, aprobado por las autoridades del COE. Este incluye, entre otras acciones, el aislamiento preventivo de todo el personal y la realización de test de PCR antes de subir a la mina, para que todos los que ingresen al lugar lo hagan con un resultado negativo. En el caso puntual de Mansfield, desde el reinicio de las operaciones en mayo del año pasado a la fecha, ya se han realizado más de 11.000 pruebas de PCR.
Tras el incidente, la empresa agradeció al cuerpo médico y sanitario de Mina Lindero, a la empresa FLYTEC (en cuyos aviones se transportaron los tests) y al Laboratorio BIONOA, donde se procesaron las pruebas de PCR.
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