Tras los anuncios de distintas provincias del país que subirán los costos de productos de panadería a partir del próximo fin de semana, desde InSalta tomamos contacto con el presidente de la Cámara de Panaderos local, Daniel Romano, para conocer la realidad del sector.
“Nosotros vamos a ser más prudentes, cada provincia tiene su realidad. Como está la situación económica tan difícil el pan francés suple comidas. Ya no es algo de la clase baja, todos están con sus bolsillos apretados”, indicó.
La realidad es que se trata de un sector muy golpeado en términos económicos, “también es un rubro solidario, con lo cual vamos a esperar un poco, si bien el aumento que se está pensando es de un porcentaje bajo, mucha gente no tiene $10 más para comprar pan. Nosotros haremos todas las evaluaciones necesarias y hablaremos con los sectores gubernamentales para buscar soluciones”.
En las panaderías se registra sobre todo una caída en la venta de especialidades, la docena de medialunas se consiguen entre $360 y $480, la gente no compra, “no solo la clase baja, nadie compra, es considerado ahora un producto de lujo”.
La evaluación que se realiza actualmente es según el precio de los insumos para la elaboración del pan francés por un lado y las especialidades por otro. “En lo que respecta al francés la suba es de acuerdo a la inflación, por ejemplo un 4% pero en lo que hace a la producción de especialidades (medialunas, panes de viena, tortas), los aumentos en insumos llegan a un 150% en lo últimos 4 o 5 meses, si bien nosotros, desde la Cámara proponemos precios, la realidad de cada panadería es distinta y quizás ahí la suba puede ser fuerte”.
La situación se evaluará en las próximas semanas, “nos vamos a tomar entre 7 y 10 días para analizar toda la situación, estamos hablando con diferentes sectores del Gobierno provincial y nacional para que vean cómo pueden aportar para paliar esta situación, en esta negociación trataremos de mantener el precio o bien que la suba sea en el menor porcentaje posible. Además no es lo mismo el interior que la capital”.
Cada provincia decide según su realidad, así es que, Tucumán anunció aumentos para dentro de 10 días, Buenos Aires para este fin de semana, Rosario y Mendoza ya subieron. “Cada uno tiene su realidad, no los juzgo, nosotros vivimos en una provincia considerada pobre, la gente viene a comprar con la misma cantidad de plata desde hace tiempo, la situación es grave y vendemos productos de primera necesidad”, enfatizó.
El Gobierno Nacional ya sabe cuál es la situación, “los panaderos no somos fijadores de precios, todo depende de nuestros costos. Desde la Cámara queremos ser justos y mantener un equilibrio, es un producto básico, vamos a ver si el gobierno reacciona. Pedimos a gritos que nos ayuden a sostener el precio, hacemos un sacrificio enorme para mantener a nuestros empleados y fuentes de trabajo”.
Ilegalidad
Otra preocupación que afecta al sector es la proliferación de negocios que trabajan en la ilegalidad, el crecimiento es alarmante. “No hablo de la gente que en cada esquina hace pan casero, si bien nos quita clientes sabemos que está trabajando para el puchero, lo bueno seria que esas personas encuentren un trabajo más estable. Nosotros hacemos referencia a grandes fábricas que no pagan impuestos y tienen a sus empleados en negro”, indicó Romano.
Sobre este punto hizo un llamado de atención a la comunidad, si se consigue un producto al 50% menos que el valor en una panadería es sin duda sospechoso. “Nadie puede hacer magia en este contexto, falta control desde el Estado. No pedimos que los cierren sino que trabajen en igualdad de condiciones, no podemos nosotros con toda la carga”.
En este sentido se solicita a las autoridades de los distintos poderes del Estado que avancen en generar mecanismos más severos contra la ilegalidad, ya que hoy solo constituye una contravención, se debe buscar una solución concreta. “El Estado tiene el poder para encontrar la solución hay que tomar conciencia de que tipo de sociedad estamos buscando, todos estábamos en una situación grave por la pandemia pero ahora estamos saliendo”.
Entre la información que se maneja desde la Cámara de Panaderos, destacan como dato que el alrededor del 50% de las panaderías son administradas por las mujeres.
Desde la organización seguirán manteniendo reuniones con el Municipio, la Dirección General de Rentas y la Policía de la Provincia. Al mismo tiempo que avanzan con encuentro con Senadores y Diputados e incluso la Corte de Justicia para avanzar en la erradicación de la ilegalidad en el rubro.
“Hay bronca e impotencia, porque no hay respuesta de los políticos y fueron elegidos para encontrar soluciones, ante esta situación la gente descree y tenemos mucha rabia, nosotros no damos más. Se deben cumplir las normas”, finalizó.
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