¿Qué olor tiene tu infancia? La infancia de Eduardo Sacchetti huele a frutillas, limón y naranja. Recuerda nuestro emprendedor que por aquellas tardes su bisabuela, la cerrillana Rosalía Fernández, hacía sus escapadas picarescas al fondo de la vivienda en donde tenía “sus preparados”. Ella y quienes la acompañaban volvían felices y con aromas a frutas.
La curiosidad le picó a Eduardo y cuando fue más grande intentó replicar la experiencia. Así nacieron sus primeras botellas de hidromiel, con las frutas que tenía disponibles y con la inexperiencia jugándole en contra. “No era un buen producto, definitivamente, pero nos lanzamos y con el tiempo pude ir viendo los secretos de la elaboración y también mejorando los procesos”, recordó.
Fueron esos, sin embargo, los cimientos para el elixir de mango que comercializa hoy con mucho éxito. “Hicimos muchas pruebas, cada vez con mejores resultados, hicimos una bebida con maracuyá, otra con frutilla hasta llegar al ‘vino de mango”, recordó.
Sobre esta cuestión, Eduardo aclaró que existe una Ley nacional que no permite llamar vino a ninguna bebida que no sea el resultado del fermentado de uvas, con lo cual la palabra "elixir" le queda muy bien al producto de su creación.
En estos momentos el único “problema” que tiene es la falta de stock, pues a poco de salir la primera tanda, literalmente se la sacaron de las manos. “En cuestión de horas ya no tenía más producto. A la gente le gustó muchísimo”, celebró.
Sin embargo, el gran despliegue comercial lo tuvo con la asistencia de una amiga a quien le da crédito por haberlo difundido en redes sociales. Se trata de Florencia Lucardi quien, con experiencia en el área de turismo, vio el gran potencial de la bebida de mangos.
Ahora Eduardo trabaja en un nuevo stock, pero debe esperar los tiempos de fermentado para un resultado óptimo. Ya debe cumplir con pedidos para Bolivia, Buenos Aires, Santa Cruz y más. Vos, anticípate y pedir tu “vino de mango” (que no es vino) al 3878 33-5548.
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