Se encendieron las alarmas en el Norte de la provincia. Tras el anuncio del Gobierno Nacional de que los privados deben pagar un bono de $ 5.000 a su personal, que debe ser efectivizado en noviembre y enero, la Cámara de Comercio de Orán salió a expresar su posición pero con un dato dramático: casi la mitad de los comerciantes locales está más cerca de cerrar sus puertas que de pagar el bono.
“Creemos que la situación de quebranto generalizado que presenta el comercio en nuestro medio, situación verificado por la última encuesta realizada por ésta cámara en la que el 44% de los comercios consideraban como una decisión posible el cierre de su establecimiento, no es viable cargar en sus presupuestos el bono en cuestión”, alertaron.
Sin embargo, destacaron que “el personal merece y necesita ese refuerzo de fin de año pero su realización deberá surgir del esfuerzo compartido del Estado y comercio, por ejemplo, a través de los impuestos de orden nacional, provincial y municipal con respecto al valor del bono”.
“Cargar en los hombros del comercio y de las pymes esta erogación suplementaria a fin de año es darles el último empujón para su desaparición. Como Cámara estamos persuadidos de la necesidad de reforzar los ingresos del personal, pero de poco servirá éste apoyo si el mismo significará el cierre de las fuentes de trabajo. Estaríamos cambiando un bono por un puesto de trabajo”, advirtieron.
En esta línea, concluyeron que “estos decretos van en contra del convenio n° 95 de la OIT, ratificado por la República Argentina, marcando además indiferencia hacia una eventual responsabilidad internacional del Estado por incumplimiento de un compromiso internacional”.