María de la Paz García Cainzo es abogada, Master en Derecho Comercial y de Negocios de la UBA, becaria FURP y referente para la OEA en el programa de Gobierno Abierto 2017. Integra actualmente la red MIA de Mujeres en la Industria Argentina y forma parte del directorio de la empresa Tabes, donde tiene a su cargo el Área de Legales y Asuntos Institucionales.
En su camino personal la acompaña su pareja y dos hijos, uno de siete y otro de tres años. "Divido el tiempo entre la familia, el trabajo y siempre sigo estudiando'', indica con orgullo María de la Paz.
¿Cuál es la situación de las mujeres en la industria?
Yo creo que avanzamos bastante respecto de lo que era hace años el lugar de las mujeres en la industria. Sin embargo hay un largo camino por recorrer, hay que romper varias brechas culturales y demás pero vamos por buen camino. De a poco las empresas y los estados en general, se van dando cuenta de la plusvalía de tener a las mujeres en cargos altos. Si bien hay empresas que tienen determinada paridad, no es aún 50% exacto y se da en los eslabones más bajos de las organizaciones.
Por ejemplo, la revista Forbes, dentro de las 500 empresas más rentables del mundo la participación de mujeres es solo del 7 % en jefaturas ejecutivas, es mucho en relación a años atrás, pero es poco para los tiempos actuales.
¿Cuál es el valor de contar con mujeres en los equipos de trabajo?
Aporta para tener otra mirada, tiene una sensibilidad distinta, otro tipo de pensamiento analítico que los hombres. Sin duda la diversidad aporta valor y balance a todos los consejos directivos. La verdad, sin perjuicio de que el rubro es de hombres, yo particularmente no sentí discriminación. Me siento muy cómoda y eso tiene que ver con el espacio que generan las empresas. En Tabes podemos hablar de igual a igual.
Sumar a más mujeres requiere también de un empoderamiento ¿Cómo se trabaja en este sentido?
Empoderar a las mujeres tiene un efecto multiplicador, que se suma al crecimiento económico. Desde las células más chicas de la organización, hasta en organizaciones de tamaño mediano o grande, es clave tener en cuenta este tema y avanzar profundizando acciones para empoderar a las mujeres.
En este sentido, ¿cuál es la realidad de Tabes?
En la empresa contamos casi con una paridad absoluta, hoy tenemos alrededor de 300 empleados, de los cuales 140 son mujeres que trabajan en cargos operarios, mandos medios, jerárquicos y en el directorio donde la conformación también es 50 y 50. Es decir que estamos a la cabeza en el tema, incluso siendo una tabacalera que suele sector un sector machista. La realidad es que en distintos rubros en Salta cuesta aceptar esta igualdad que es inherente y un derecho humano.
En la pandemia atravesaron también una situación particular…
El año pasado en relación con la pandemia, Tabes tuvo una situación muy particular, tuvimos un crecimiento exponencial por la demanda estacionaria y a nuestras mesas de trabajo sumamos a más mujeres. Esto impactó mucho en su economía, sus hijos o esposos se quedaron sin trabajo y ellas se transformaron en el eje y sustento de la familia. Su forma de encarar el trabajo fue distinta, sin duda la diversidad se traduce en mayor rentabilidad porque suma a hombres y mujeres, creemos en paridad desde la base.
Somos una empresa que adhiere a los principios WEPs de empoderamiento de ONU Mujeres, estamos avanzando en sistematización y monitoreo de acciones de paridad. También, a través de la Secretaría de Derechos Humanos de Salta, nos capacitamos y acercamos información sobre género y asistencia ante situaciones de violencia.
¿Cómo se encuentra el sector tabacalero en Salta?
El sector es uno de los pilares de la economía de Salta y del país. Nosotros nos dedicamos al proceso de pre-industrialización, compra y acopio del tabaco. Exportamos y hacemos bolsas para armar el cigarrillo, actividad que se ha retomado recientemente por los clientes. Hoy las industrias sufren la incertidumbre, la traba por las exportaciones de productos que utilizamos en las empresas, repuestos de maquinarias, etc. En los últimos 8 meses vimos un pequeño crecimiento y está bueno. Los Gobiernos deben apoyar a las industrias, deben tomar medidas excepcionales por ejemplo en el plano impositivo, porque como están las cosas hoy los ingresos que los industriales recibimos va para el pago de impuesto y aportes. Es clave contar con apoyo Estatal.