Por esos días, no había tantas rutas asfaltadas, ni galpones techados a disposición, ni supermercados por doquier. Pero había sueños. Y había gente con ganas de hacerlos realidad. Así nació COFRUTHOS, la cooperativa que hoy cumple 40 años y que se convirtió en un símbolo de resiliencia y trabajo colectivo en la economía frutihortícola de Salta.
“Vinimos del Mercado San Miguel con sueños al hombro”, confiesa el actual presidente del Consejo de Administración de la cooperativa, Juan Russo. Y no exagera: literalmente llegaron con cajones, camiones y la determinación de construir un espacio comercial propio, organizado y justo. Un lugar donde productores, comerciantes y consumidores pudieran encontrarse sin intermediarios ni especuladores.
La historia se remonta a 1969, cuando un puñado de emprendedores —entre ellos Lalo Dib Yamil y Turi Russo Belbruno— comenzaron a pensar en grande. Entre charlas en el desaparecido Hotel Oriental, reuniones improvisadas en galpones y la certeza de que había que salir del microcentro, fueron soñando lo que años después se formalizaría como COFRUTHOS: “Cristalizamos la idea en 1972, pero la verdadera apertura comercial llegó recién en 1985”, cuenta Russo Belbruno, uno de los fundadores.
Con el apoyo de 175 socios fundadores y el Estado provincial, lograron construir una infraestructura clave que ordenaría el mercado, abriría fuentes de trabajo y modernizaría la cadena alimentaria local.
Crisis, reconstrucción y un mismo espíritu
¿Todo fue fácil? Claro que no. “En el 96 el techo se vino abajo y nadie sabía si al otro día íbamos a tener qué comer”, recuerda una de las integrantes de la cooperativa. Pero el golpe no los frenó: miembros y familias trabajaron a pulmón, el mercado siguió funcionando en condiciones precarias y la gente de Salta respondió con una fidelidad que todavía emociona.
Hoy, la cooperativa reúne variedad de rubros: frutas, verduras, fiambres, carnes, regionales, productos secos, artículos de limpieza y hasta servicios gastronómicos como la famosa pizza del mercado (sí, en este mercado también), infaltable delirio salteño.
El sueño: una sucursal al norte
El presente los encuentra con un sueño nuevo: abrir una sucursal en zona norte. Porque si algo aprendieron en estas cuatro décadas es que el acceso a alimentos de calidad no puede ser un privilegio. “Queremos acompañar a más familias, estar cerca, crecer sin perder nuestra esencia”.
COFRUTHOS no solo celebra años: celebra el valor de lo colectivo, del trabajo honesto y del coraje para empezar una y otra vez, con las manos llenas de ganas y los sueños siempre en marcha.