En diálogo con IN Salta el Secretario Gremial del Sindicato de Empleados de Comercio de Salta, Ángel Ortíz, aclaró que se trata de 65 empleados de la firma Garbarino y de la firma Compumundo, cesanteados de sus labores por la misma sociedad.
Los trabajadores fueron desafectados tras la pandemia cuando se fueron cerrando las sucursales tras meses de falta de stock y actividades. Los telegramas llegaron de forma intempestiva y obligaron a los trabajadores a buscar otras alternativas y buscar el amparo sindical.
Tampoco los ofrecimientos de indemnización fueron óptimos, ya que se les ofreció abonar solo un porcentaje y en cuotas. Ahora deberán alcanzar un acuerdo antes de que la firma se declare en quiebra y los procesos de cobro sean más complejos.