Los sectores de la producción artesanal y la cultura de Salta atraviesan una situación de emergencia desde que se inició la pandemia. Las restricciones sanitarias los han dejado sin la posibilidad de venta ni reposición de insumos, acabando así con la que en muchos casos es su única fuente de ingresos.
La vocera Mimi Tejerina expresó que “ahora es el momento en que nos tienen que atender, somos un sector que históricamente se procuró su fuente laboral, sus ingresos aportando al turismo y la cultura local. Pero ahora nos encontramos en emergencia y necesitamos que se nos asista”, exhortó.
“Hace cinco meses que venimos reclamando, advirtiendo que hay compañeros que no tienen de dónde sacar para comer, haciendo colectas, recurriendo a familiares para comer. Lo que logramos es obtener 45 subsidios de 25 mil pesos y 170 subsidios de 5 mil pesos. Para una comunidad de 2 mil artesanos se han destinado $ 1.900.000, menos de mil pesos por artesano”, señaló.
“La asistencia fue distinta para el sector de la cultura y el turismo que entendemos que están mal, pero nosotros también estamos mal y no se nos está tomando en cuenta como parte fundamental de estas actividades”, reclamó.
“Somos trabajadores de la cultura y tenemos que exigir que se pongan en funcionamiento las leyes que nos amparan, porque nos estamos comiendo los materiales. Es necesario que hagamos visible nuestra lucha para que sepan cómo vivimos nosotros, porque en muchos casos esto se ignora o no se toma en cuenta”, concluyó.
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