El anuncio tiene apenas tres días, pero muchos líderes mundiales y los referentes nacionales ya salieron a sentar su postura. En contraposición, te ofrecemos dos opiniones de especialistas que llaman a la mesura, a respetar los tiempos; pero que ya avizoran un panorama de lo que podría llegar a generar este mega acuerdo económico con Europa.
El vocero de la Unión Industrial Argentina, José Urtubey, manifestó que desde lo geopolítico es un anuncio muy importante, un acuerdo de inserción internacional. Sin embargo, se manifestó “en particular desconcertado por la falta de información, sobre todo desde la industria. Por lo general hay que evaluar muy bien la letra chica en el impacto arancelario que tienen sobre la industria para evitar primarizarnos”, advirtió.
El referente agregó que “no podemos darnos el lujo de ser un país agroexportador y de servicios. Tenemos que ser un país donde el modelo de desarrollo industrial esté presente, porque es el que más y mejores fuentes de trabajo genera”, y anticipó que esta semana tendrá una reunión con el ministro de la Producción Dante Sica.
Consultado con respecto a la relación con Brasil, Urtubey evaluó que “Argentina tiene una falta de competitividad enorme en economía. Nos falta financiamiento, tenemos presión tributaria, el sistema financiero no acompaña al sector productivo; con lo cual yo digo que tenemos que trabajar los desafíos futuros. No podemos salir a competir al mundo cargados de sobrepeso”, ironizó.
Para finalizar criticó a “aquellos que salieron a decir que este acuerdo era la solución a todos nuestros problemas y a aquellos que salieron a condenarlo sin conocer sobre el tema”.
Ganadores y perdedores
Por su parte, el economista Roberto Dib Ashur observó que “este acuerdo llevó 20 años; no se hizo entre gallos y medianoche. Tuvieron que suceder varias cosas para llegar a esto. Por empezar, que confluyan los presidentes en un pensamiento similar y el Parlamento Europeo lo tome de esa manera”.
Explicó que “cuando se habla del convenio entre el Mercosur y la Unión Europea se habla de que el 91% de las importaciones -es decir lo que nos vende Europa a nosotros- van a ser liberadas de aranceles en un lapso de 10 años y algunos productos muy sensibles de la economía en un lapso de 15 años. Algo similar ocurrirá como contraparte: lo que nosotros le vendemos a Europa se va a liberar en 10 y los productos más sensibles en 15 años”.
Con respecto al sector de agroindustria, el especialista comentó que a los países de Europa les preocupa mucho que se llenen de carne argentina o de soja las góndolas europeas. “Pero para eso se fijaron cuotas. No es que uno pueda vender la cantidad de carne o productos que uno desee, sino que hay cantidades determinadas de cada uno de estos productos. Por ejemplo, 99 mil toneladas de carne, 180 mil toneladas de aves, 25 mil toneladas de porcino, lo mismo con el arroz, etc.”, detalló.
Y especificó que “en otros productos como la leche en polvo, son cuotas recíprocas; es decir que si vos me vendes 30 mil toneladas, yo te vendo a vos 30 mil toneladas, con lo cual se compensan. Este tipo de acuerdo de producto por producto ya fue determinado, por ejemplo en las toneladas de miel. Lo santiagueños están contentísimos. Cuando hablamos de esto hay ganadores y perdedores, hay algunos a los que les viene muy bien y otros que van a sufrir este acuerdo en el caso de que sea aprobado.”, anticipó.
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