Con mucha preocupación, el Gobierno salió a anunciar lo que señalan los más altos funcionarios, es la última oferta para que los docentes –sector que conserva mucha dureza en sus protestas- vuelvan a clases: 35% de aumento escalonados, más dos bonos de $ 2.500.
El gobierno de la provincia se encuentra en una encrucijada. Necesita cerrar un acuerdo sensato que contemple el contexto de adversidad macroeconómica, la posibilidades financieras de la provincia y las justas necesidades de los trabajadores del estado de no perder frente a la inflación. El problema radica en que en plena negociación salarial, no tiene un solo interlocutor válido en el sector que concita el 45 % de los empleados públicos, los docentes. Cabe recordar, que graves denuncias de corrupción, obligaron a Patricia Argañaraz, secretaria general de ADP, a pedir licencia y de esta manera el gremio más importante del grupo que nuclea a los maestros perdió representatividad y hoy puso en las calles a trabajadores que se autodenominan “independientes” o “autoconvocados”.
Hoy, el ofrecimiento que hace la provincia para el aumento es muy superior a lo que el presupuesto provincial estipula como inversión en obras públicas. El aumento supera los 9.000 millones de pesos/año; distribuidos en 72.000 empleados públicos. Es importante señalar que Salta es una provincia de las más pobres del país, con muchas dificultades desde el sector privado para ofrecer empleo, lo que sumado a lo extenso y diverso de su territorio, necesita de un Estado presente que se transforma en el principal dador de mano de obra. Conclusión: En diez años, se pasó de destinar a gastos en personal, un 42 % de los recursos totales, a un 66% en 2017. Y esta es una preocupación no solo en la Administración Pública hoy, sino también en los sectores empresarios que se manifestaron públicamente. “Este crecimiento del sector público va dañando el desarrollo económico y social. Hay una puja gremial desmedida que se viene viendo estos años, a nivel nacional y se replica en las provincias”, dijeron.
Con este ofrecimiento, el Gobierno podrá controlar el equilibrio delicado en el que se encuentra en este momento, si reubica recursos de la obra pública para atender los salarios. “No tenemos ningún interés político que nos mueva más allá de la responsabilidad enorme de estar a cargo de la administración de la provincia. Vamos a cuidar el equilibrio que logramos en 2018, luego de tres años consecutivos de déficit fiscal. Queremos sostenerlo, y transitar este 2019, como lo hicimos el año pasado, sin endeudarnos. Y en eso, nuestra decisión es férrea”, se escuchó en alguno de los despachos de Jefatura de Gabinete, donde la actividad es incesante y este tema se tornó prioritario.
El ofrecimiento
La Provincia otorgará un 35% de incremento con una cláusula de redeterminación y dos bonos compensatorios.
Este incremento será en seis tramos: 5% en febrero(ya abonado), 7,5% en marzo, 5% en junio, 7,5% en agosto, 5% en octubre y 5% en noviembre. Alcanza a todos los sectores de la Administración Pública Provincial; e incluye la posibilidad de sentarse a rever el acuerdo cada tres meses si las condiciones del país desmejoran por fuera de lo previsto.
Los datos en los que se asienta el gobierno provincial como fortaleza es que solo los docentes de Salta y San Luis, ganaron poder adquisitivo en los últimos años. Por ejemplo, las negociaciones a las que arribaron entre 2014 y 2017, le permitieron a los salarios estatales salteños, una ganancia acumulada de poder adquisitivo del 24,5%.
Además, desde el Gobierno ya comunicó el cronograma de pagos del sueldo de marzo (mes del que transcurrió solo su primera quincena, cuando gran parte de los asalariados del sector privado no cobraron febrero, por ejemplo): “El sábado 30 estarán disponibles en cajeros los haberes para la franjas uno y dos de la Administración Pública Provincial. Los salarios se percibirán con un aumento acumulado del 12,5% de acuerdo a lo resuelto recientemente en las paritarias docentes. Este incremento también se aplica a las Asignaciones Familiares por Hijo según tramos.
El jueves 28 se pagará el primero de los dos bonos anuales de $2500 pesos tanto para la franja uno y dos; el viernes 29 estarán disponibles los importes correspondientes al Incentivo Docente”.
Contexto Nacional que no afloja
Otros datos sobre los que se conversaron en las innumerables reuniones entre trabajadores y funcionarios, se habló del contexto económico nacional.
Las previsiones de los principales indicadores macro de 2019 son: PBI -0,5%; Consumo Privado -1,6%; Consumo Público-3,4%; e Inversión -9,7%. A esto se le suma una estimación del tipo de cambio nominal $/USD 40,1 (ayer cerró más arriba del estimado para el año y estamos en marzo) y una variación anual IPC estimada en 23,0% (ayer se conoció el índice de febrero en 3.8%).
Y estos números de inflación que mueven los intereses de los trabajadores estatales, son los mismos que le imprimen mesura a los funcionarios provinciales que con total crudeza, dicen que “las paritarias hoy se negocian en un contexto nacional similar a 1999”, y agregan: “Nos encaminamos a una implosión de la economía a nivel nacional, por eso nuestro interés central está puesto en cuidar este equilibrio que apenas pudimos conseguir. El sector privado que es el que sostiene con sus impuestos al Estado está muy complicado, con negocios y empresas que cierran, con trabajadores en la calle. Tenemos que ser extremadamente cautos en este momento”.
Salarios docentes
Algunos datos a los que tuvo acceso IN Salta, indican que el 60 % de los docentes salteños, alrededor de 17.000 trabajadores, cobran $36.700; mientras que alrededor de 11.000 docentes (un 39%) cobra más de $ 50.000.
Según datos ofrecidos por el Ministerio de Hacienda de la Nación, en el esquema del país, Salta está novena en el ranking de mejores salarios docentes. Y si se la compara con otras provincias del norte, Salta paga un 44% más de Santiago del Estero, un 30% más que Catamarca, un 22 % más que lo que se paga en Jujuy; y un 12 % más que Tucumán.
Los intendentes en alerta
Desde los municipios se sigue con mucha atención lo que sucede con los estatales provinciales. Como se sabe, los valore con los que cierre paritarias la provincia, serán los que se repliquen en cada uno de los 60 distritos salteños.
La pregunta es si las cuentas locales de los municipios más vulnerables de la provincia estarán en condiciones de afrontarlos.
Y todo esto, en un año electoral que tiene al gobernador Juan Manuel Urtubey, lanzado a una carrera a la Presidencia de la Nación.
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