Inicio de clases: Librerías, casas de uniformes y los transportes escolares viven una realidad impensada

Todo el sector vinculado al rubro escolar se enfrenta hoy a consumidores precavidos, expectantes y sin confianza para invertir ante la nueva modalidad de clases.

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El actual ciclo lectivo plantea grandes desafíos para toda la comunidad. El sistema, además de ser bimodal (clases presenciales y virtuales), requiere que cada establecimiento adecue días y horarios de cursado según la cantidad de estudiantes y la capacidad edilicia. Este inédito panorama impulsó cambios significativos en el comportamiento del consumidor, que se muestran muy precavidos frente a la decisión de compra.


Ante esta realidad, rubros como el de librerías, venta de uniformes y servicios de transporte escolar viven una gran incertidumbre, pero con confianza en que el panorama tendrá mejoras en un corto plazo.

Así lo expresó Mercedes Cornejo, de Mama Terra. “Nuestras ventas se redujeron en un 50% en cantidad de prendas. Esto se da por distintos motivos, por un lado muchas personas tienen prendas sin uso del año pasado y en ferias impulsadas por padres y colegios pudieron venderlas o cambiarlas, lo que es muy atípico. Y por otro lado el cliente es hoy muy precavido, ya no se realizan compras grandes. Se vendió solo el uniforme de verano, lo justo y necesario, a diferencia de años anteriores”.

Otro negocio de igual rubro, sintió una baja de hasta un 60% en sus ventas de acuerdo al año pasado, es el caso de Mariela Prietto de Nueva Línea Uniformes. “Febrero suele ser el mes con más movimiento de todo el año, hoy esta realidad no se compara con nada”. Con destacada trayectoria en el sector, Prietto siente que “es como volver a empezar el emprendimiento. Los padres compran únicamente lo más imprescindible. No se consiguen materiales y hay mucha incertidumbre en cuanto a la continuidad de las clases”.

En lo que respecta a la lista de útiles escolares, desde Librería Lerma Solana López Fleming coincidió en que el sentimiento más presente actualmente es la incertidumbre. “La gente dudaba del inicio de las clases por lo que la venta de útiles arrancó muy despacio y recién ahora se está vendiendo. Pero es una época muy especial: se compra de a poco hasta que se tenga confianza en que no se suspenderán las clases”.

Las erogaciones de dinero suelen ser altas en esta época, por lo que se busca tener seguridad para concretarlas. Sobre este punto la empresaria López Fleming indicó que, “considerando que el proceso de vacunación está avanzando, esperamos que se pierda el miedo y todo vaya mejorando, siempre y cuando cuidemos nuestra salud. Cubrir la vacunación en docentes es sin duda una gran idea para evitar riesgos”.

Otros de los servicios que a esta altura del año solía tener su capacidad colmada era el de los transportes escolares, situación que ha cambiado drásticamente desde el inicio de la pandemia. “Aún no podemos realizar un balance de situación, lo único que tenemos en claro es que nuestra forma de trabajo ha cambiado totalmente”, indicó Nilda Bini, presidente de la Asociación de Transportes Escolares.

La cantidad de pasajeros, los días de clases y la realidad de cada familia y escuela es distinta y esto afecta directamente a los transportistas. “Lo único que tenemos en claro es que necesitamos volver a trabajar y como todos deseamos que el virus se tranquilice y que no vuelva a modificar nuestras actividades con su comportamiento”.


También hay lugar para el optimismo

Con el espíritu emprendedor presente, en todos los casos, se reconoce también cierto optimismo. “La gente está feliz por el inicio de clases, pero también con miedo durante este primer mes. Esperamos que todo siga su curso”, indicó Mercedes Cornejo.

En relación a la economía hay expectativa por el llamado rebrote post pandemia. “Hay mucho por crecer y trabajar. Superada la pandemia la situación va a mejorar. Como país tenemos mucho que ofrecer y estoy confianza en que a partir de mediados de año estaremos mejor”, indicó Solana López Fleming, al mismo tiempo que señaló la importancia de vivir en positivo, no buscar razones de disputa, sino por lo contrario, resaltar coincidencias y empujar todos para el mismo lado.

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