La tormenta que asoló a la provincia el jueves de la semana pasada no sólo generó problemas y complicaciones en las ciudades. También en el campo impactó con fuerza. Los productores de granos y legumbres vieron, impotentes, inundarse hectáreas enteras y sus cosechas malogradas.
“La lluvia les llegó en un momento sumamente inoportuno, ya que les impidió una cosecha y una resiembra exitosa. Campos enteros se convirtieron en lodazales, aunque aún no hemos podido cuantificar las pérdidas, sabemos que son muchas y que a los productores les va a llevar mucho tiempo recuperarse. Imagínese si antes nos costaba, con una economía más estable y una moneda un poco más fuerte…ahora estamos realmente en problemas porque los insumos los tenemos que comprar a precio de dólar”, pronosticó consultado por IN Salta el presidente de la Sociedad Rural de Salta, Ignacio García del Río.
En Anta, las intensas lluvias que precipitan desde los primeros días de marzo preocupan especialmente a los productores sojeros de Las Lajitas ubicada a 195 kilómetros al sur de la capital provincial. El productor Emilio Gaham señaló que la caída de agua duplicó la media, alcanzando los 1500 milímetros, más del doble de los 700 milímetros esperados. Esto trajo complicaciones a los productores de algunas zonas que no pudieron sembrar ya que el suelo no lo permite.
“Históricamente es una de las zonas más perjudicadas cuando se desatan este tipo de fenómenos y por eso nuestros esfuerzos están apuntados a la asistencia de este sector y a otros, como en los Valles; en donde precipitó en forma de nieve de forma también imprevista. Tenemos reuniones con el Gobierno y con otros organismos que nuclean a los productores rurales como Prograno para que se avance en las inversiones necesarias y tan largamente esperadas en infraestructura, en caminos”, comentó.
Sin embargo, hay otro sector que aguardaba con ansias este desahogo de la naturaleza y que se vio beneficiado. Se trata del sector ganadero. “No a todos los afectó la tormenta de forma negativa. Al sector ganadero le vino muy bien, las vacas sufren mucho la sequía y ahora se podrán alimentar de pastizales renovados y estarán bien con la humedad remanente que perdurará por muchos días”, concluyó.
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