La edición 2025 del famoso evento de descuentos online —que promete ofertas, cuotas sin interés y envíos gratis— puede convertirse en una pesadilla si no estás preparado. Por eso, antes de “agregar al carrito”, hacé una pausa para comparar precios reales, verificar la reputación del vendedor y leer con atención las condiciones de cambio, envío y garantia.
En primer lugar, asegurate de ingresar siempre a tiendas o marketplaces de confianza y a través de la página oficial del evento. Esto previene que caigas en sitios falsos o promociones que sólo existen en tu pantalla. Además, comprobá que el sitio tiene candado de seguridad (URL que comienza con “https://”) y evitá usar redes públicas al hacer el pago.
Otro punto clave: registrá capturas de pantalla o guardá el enlace de la oferta antes de concretar la compra. Si después la empresa justifica la falta de stock o modifica el precio, esas pruebas pueden hacer la diferencia. También revisá si la "rebaja" es real: a veces suben el precio días antes del evento para luego simular un descuento.
Cuando completes la compra, verificá los plazos de entrega y los costos de envío. Si un comercio promete “entrega en 15 días” y luego demora, tenés derecho a reclamar o incluso cancelar la compra sin costo. En ese sentido, la ley establece que para compras online existe un botón de arrepentimiento, por el cual podés devolver el producto dentro de los 10 días de recibido sin dar explicaciones —siempre que esté en su pack original.
A la hora de elegir el medio de pago, preferí tarjetas o plataformas reconocidas; evitá transferir dinero por canales sospechosos o compartir contraseñas. En un contexto digital, el phishing y los fraudes se multiplican justo en estas fechas donde el “clic rápido” parece clave.
Al recibir el producto, bajale el brillo a la emoción y chequeá que coincida con lo ofertado: modelo, color, tamaño, especificaciones. Si todo va bien, ¡genial! Pero si no, la factura, los correos y los mails te sirven para reclamar ante defensa del consumidor.
Por último, recordá que una buena oferta sólo vale si vos también estás tranquilo: antes de comprar, chequeá que podés pagar las cuotas sin intereses, que la compra no sacrifique un presupuesto mensual clave y que no sea una compra impulsiva que luego te termine generando más estrés que alegría.
Con estos siete consejos en mente, podés entrar al CyberMonday con los pies en la tierra y la tarjeta lista para lo que realmente te convenga. ¡Felices compras inteligentes!

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