El fertirriego consiste en aplicar el agua y el fertilizante de manera conjunta, administrando ambos insumos de acuerdo a las necesidades nutricionales específicas de cada cultivo. “Es una herramienta muy importante para aumentar la eficiencia en el uso de los recursos, lo que se traduce un impacto positivo sobre la productividad así como sobre el medio ambiente, en un contexto de preocupación mundial por la escasez de agua y nutrientes en el suelo”, explicó el experto.
Consultado sobre los cultivos que mayor aprovechamiento pueden hacer del fertirriego, Van Der Pijl señaló que “cualquier productor puede usarlo, pero en general vemos que los productores frutihortícolas y los que cultivan en invernáculos son más propensos a incorporar este sistema, aunque recientemente en algunos países estamos viendo también a productores de cultivos extensivos, que han comenzado a incursionar en el uso de fertirriego”.
La principal barrera para su masificación es la inversión inicial que requiere la implementación, aunque según Van der Pijl la ecuación termina resultando positiva por la mayor precisión en el uso de los recursos, el incremento de los rendimientos y en muchos casos las mejoras en la calidad. “Los productores suelen dudar por la inversión inicial que requiere y la dificultad de comprobar de antemano los beneficios que tendrán, por eso en general la adopción está más vinculada a la necesidad por las limitaciones hídricas de las zonas: cuanto más seca es la región, más rápida la incorporación del fertirriego”, indicó.
Durante su estadía, además de intercambiar experiencias con productores, presentó la nueva línea de fertilizantes para fertirriego, formulaciones que combinan macro y micronutrientes en forma balanceada, con alta calidad física teniendo en cuenta cada etapa fisiológica del cultivo.
Acerca de Yara
Según explicaron desde la empresa, el conocimiento, productos y soluciones de Yara generan crecimiento para agricultores, distribuidores y clientes industriales de manera rentable y responsable, mientras protegemos los recursos, los alimentos y el medio ambiente de la Tierra.
Los fertilizantes, programas de nutrición de cultivos y tecnología que proponen, incrementan el rendimiento, mejoran la calidad de los productos y reducen el impacto ambiental de las prácticas agrícolas. Las soluciones industriales y ambientales que desarrollan, aseguran que mejoran la calidad del aire, reduciendo las emisiones de la industria y el transporte, además sirven como ingredientes clave en la producción de una amplia gama de productos. Desde la compañía, aseguran que fomentan una cultura que promueve la seguridad de empleados, contratistas y la sociedad.
Fundada en 1905 para solucionar la hambruna emergente en Europa, Yara tiene hoy presencia mundial con más de 12.000 empleados y ventas en más de 150 países.
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