“Este año es muy particular ya que la situación económica ha complicado al mundo del trabajo, no solo al trabajador en su capacidad adquisitiva, sino a las fuentes de trabajo. El que tiene un trabajo estable puede ordenar y planificar su vida. El que pierde el trabajo se le viene el mundo encima", explicó el ministro y agregó que “en Salta, tenemos 32% de informalidad y eso es mucho".
El Ministro señaló, además, que en esta coyuntura económica compleja, “una de las variables de ajuste es el trabajador. Se lo usa para bajar costos en épocas de crisis". Y explicó que frente a esa realidad, desde su cartera, se trabaja para recordarle al empresario que un trabajador no registrado es más caro frente a una contingencia de accidente o de salud, o un juicio laboral. “Es más barato y sencillo sostener el empleo, y ese ha sido el eje de nuestra tarea este año", dijo Costello.
Al ser consultado sobre las cifras de desempleo, el Ministro señaló que “en Salta, según nuestros números relevados, que no incluyen todos los casos porque muchas veces se hacen acuerdos entre las partes o no pasan por la Secretaría de Trabajo; este año registramos 2.000 desvinculaciones. Un número idéntico al año pasado". No obstante, Costello se mostró muy preocupado porque este año no se logra la reabsorción de esos trabajadores en el mercado laboral, “cosa que si sucede en épocas de normalidad económica“.