Silvana Crivelli: “Nunca sentí que debía demostrar más solo por ser mujer”

La empresaria fue nominada para representar a Salta en el evento de la CAME, que reconoce a las mujeres destacadas. En IN Salta le consultamos por su experiencia como mujer empresaria en el mundo gráfico y las claves para mantenerse siempre vigente.

La Cámara de Comercio e Industria de Salta postuló a Silvana Crivelli para representar a Salta en la distinción de Mujer Empresaria, organizada por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Agradecida por la nominación, Silvana valoró esta postulación y analizó cuál es la realidad de la mujer empresaria hoy.

“Estoy agradecida con la Cámara que es la que me propone. Hace 50 años que pertenecemos a la Cámara de Comercio e Industria de Salta, una institución muy querida por mi padre, primera generación, yo la segunda, y esperemos que sea del agrado de la tercera que ya está tomando las riendas de la conducción de la firma”, aseguró.

Con respecto a su nominación, Crivelli compartió su experiencia personal, en la cual nunca experimentó rechazo por su condición de mujer, aunque expresó su preocupación por aquellas mujeres que sí lo padecen. “Particularmente yo, como mujer, me comporté siempre como una más con mis pares; pero nunca sentí que tenía que demostrar más que alguien sólo por ser mujer en el ámbito laboral. Ese no ha sido mi caso, aunque no niego que es una situación que muchas mujeres han tenido que transitar” lamentó.

Silvia creció literalmente entre papeles y la industria gráfica fue su mundo desde la infancia. “Crecí en la empresa. Yo de niña iba al taller, iba a la planta, me hacía amiga de la gente y por eso siento un amor profundo por la empresa. Estudié Licenciatura en Administración de Empresas en la Ucasal, trabajé en dos empresas grandes de la provincia que no tenían que ver con el mundo gráfico, pero al ver a mi padre y justamente al no existir ningún tipo de presión, se quedó más en mí el amor hacia el oficio gráfico”, comentó.

A dos años de su retiro formal, aunque no absoluto, son los jóvenes de la familia quienes se preparan para la nueva conducción de la firma. Se trata de una firma que en su historia de más de 60 años superó las crisis financieras, sanitarias, sociales y políticas de un país tan convulsionado como lo es Argentina. “Crecimos superando la crisis en base a una fe inquebrantable en el esfuerzo, la buena voluntad y las buenas prácticas laborales y comerciales. Durante las crisis recibimos mucho apoyo del personal. Tenemos un equipo fantástico”, valoró.

De hecho, ante el avance tecnológico y la digitalización de procesos, hasta hace poco se pensaba que ya había llegado la etapa de cierre. “Estábamos pensando ponerle un cierre decoroso, digno, pero la pandemia hizo que la nueva generación ingresara a darnos una mano con la crisis. Pero ya estábamos preparados porque desde el 2011, luego de una interesante capacitación de la Escuela de Negocios de la Universidad Austral, empezamos una serie de capacitaciones en las que nos obligaban a pensar en el futuro de la empresa y veíamos que había artículos que tendían a desaparecer como el formulario continuó y fue lo primero que eliminamos, antes de que muera”, explicó.

“Es cierto que hay productos que no se hacen más como papelería, recibos, sobres, catálogos, revistas periódicas. Pero hay otras que aún subsisten y el mundo editorial ha cambiado al libro de autor, de fotografía, de otro tipo. El mundo editorial no ha muerto, sino que ha mutado”, aseguró. “La clave es pensar hacia dónde va el mercado y no quedarse en el corto plazo. Esa es una de las razones por las que la empresa ha sobrevivido tantos años”, concluyó.