Autoridades de los centros privados de diálisis de Salta y Jujuy realizaron un balance del año y destacaron los avances tecnológicos, la inversión sostenida y el compromiso con la calidad del tratamiento, aun en un contexto económico complejo.
“Cerramos el año con mucho optimismo, a pesar de todos los avatares que hemos sufrido. Creemos en nuestras organizaciones y en el trabajo que venimos haciendo”, señaló el referente médico de la entidad, al destacar que en los últimos dos años todos los centros incorporaron hemodiafiltración (HDF), una técnica de diálisis de mayor calidad.
Esta innovación implicó una inversión significativa, especialmente en infraestructura y calidad del agua, un requisito indispensable para aplicar HDF. “Es una terapia superior, que se realiza en el mismo tiempo de tratamiento y representa un paso adelante muy importante”, explicaron. A esto se suma la implementación de diálisis prolongada y la modernización integral de las unidades, que fueron actualizadas y equipadas con nueva tecnología.
Compras internacionales para sostener la calidad
Otro de los hitos del año fue la decisión estratégica de realizar compras de insumos en China, una experiencia inédita para el sector. “Viajamos, aprendimos y construimos confianza con los productores. Es una forma concreta de reducir costos sin resignar calidad, que también es parte de nuestra responsabilidad”, remarcaron.
Honorarios y relación con las obras sociales
En cuanto a la situación económica, desde CEPRIDIASA señalaron que el Estado tiene un rol central en la sostenibilidad del sistema: aproximadamente el 40% de los pacientes de diálisis corresponden a PAMI y otro 40% a obras sociales provinciales o al sistema público de salud. El resto se distribuye entre obras sociales sindicales.
“Padecimos atrasos que ya son de público conocimiento, especialmente en algunas obras sociales nacionales. Con el IPS tenemos buen diálogo y trabajamos para encontrar mejoras que permitan sostener la calidad del tratamiento, algo a lo que no vamos a claudicar”, afirmaron.
El desarrollo de centros de diálisis en el interior provincial fue otro punto destacado. “Son inversiones muy onerosas, con recuperos económicos complejos, pero hay profesionales que apuestan igual. Eso eleva el nivel sanitario local y mejora todo el sistema de salud”, indicaron.
La instalación de centros en localidades como Joaquín V. González, donde antes no existía este servicio, no solo evita traslados de pacientes sino que también forma recursos humanos, capacita enfermeros y fortalece las redes de atención médica.
Números que dimensionan el sector
Actualmente, en Argentina más de 30.000 personas reciben tratamiento de diálisis. En Salta y Jujuy, el número supera las 1.100 personas, que en su mayoría realizan hemodiálisis tres veces por semana. Un 9% accede a diálisis peritoneal continua ambulatoria, una modalidad que también es impulsada por los centros nucleados en CEPRIDIASA.
En Salta funcionan 11 centros privados de diálisis y en Jujuy 8, que en conjunto emplean a más de 900 personas, entre nefrólogos, nutricionistas, psicólogos, médicos de guardia y personal técnico-sanitario. “Es trabajo genuino, calificado y de calidad”, subrayaron.
Con inversiones, innovación tecnológica y una fuerte presencia territorial, los centros privados de diálisis de Salta y Jujuy cierran el 2025 reafirmando su compromiso con los pacientes y con el fortalecimiento del sistema de salud regional.
Ya te dejé armada la nota periodística completa, con un tono claro, profesional y optimista, ordenando todo el testimonio del doctor y dándole una lógica de cierre de año, impacto sanitario y números duros, como suele funcionar bien en medios de negocios y salud.
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