No matemos al paciente: los riesgos detrás del desarme de Lebac
Un error de diagnóstico en la medicina puede ser fatal, en tanto lo que puede ayudar a curar algunas patologías puede agravar el cuadro de otras. Lo mismo podría decirse de la política monetaria. Mientras la idea de migrar el stock de pasivos remunerados del Banco Central (BCRA) a bonos del Tesoro Nacional hubiese tenido algunos efectos positivos en otra coyuntura (como, por ejemplo, impulsar el desarrollo del mercado de bonos locales y financiar de forma más sustentable el déficit fiscal), el programa actual de recompra de Lebac con reservas y dolarizando la deuda pública es como prescribir aspirinas frente a una hemorragia.
Un error de diagnóstico en la medicina puede ser fatal, en tanto lo que puede ayudar a curar algunas patologías puede agravar el cuadro de otras. Lo mismo podría decirse de la política monetaria. Mientras la idea de migrar el stock de pasivos remunerados del Banco Central (BCRA) a bonos del Tesoro Nacional hubiese tenido algunos efectos positivos en otra coyuntura (como, por ejemplo, impulsar el desarrollo del mercado de bonos locales y financiar de forma más sustentable el déficit fiscal), el programa actual de recompra de Lebac con reservas y dolarizando la deuda pública es como prescribir aspirinas frente a una hemorragia.