IN Salta: Bienvenido a Salta. ¿Qué mirada tenés de la economía salteña?
Damián Di Pace: Creo que Salta tiene dos grandes eslabones que logró elaborar muy bien. El primero es esta relación entre comercio, ciudad y turismo que está en el corazón de Salta y que viene trabajándolo muy bien hace mucho tiempo. Incluso logró llevarlo más allá de la ciudad, a la región de las bodegas, etcétera.
Después está, con un potencial que todos ven como muy fuerte, el sector primario de la economía como la Minería, que ha crecido en términos reales, que tracciona, y que va a involucrar a muchas pymes en la oferta de servicios en la economía.
También hay deudas, como por ejemplo la infraestructura. Conectar el norte y el centro del país es fundamental hacia el futuro. Toda la economía argentina tiene que mejorar su nivel de infraestructura para que el salteño esté mejor conectado. Y hay otros desafíos como una reforma tributaria y una reforma laboral. Esto es fundamental para que crezca la inversión privada, que haya un mayor nivel de previsibilidad en el retorno a la inversión.
IN Salta: La semana pasada el Gobierno de Salta anunció una rebaja de impuestos provinciales, especialmente de Ingresos Brutos (Actividades Económicas). ¿Qué te parecen estas políticas de baja de impuestos?
Damián Di Pace: Eso es muy, pero muy importante. ¿Por qué es muy importante? Porque Ingresos Brutos es un impuesto que se encadena en toda la economía y eleva la presión impositiva en toda la cadena. Y aprovecho y les dejo una opinión: Creo que no está mal debatir acerca del Super IVA. Yo creo que Salta se podría ver beneficiada, a diferencia de otras provincias. Salta es una provincia muy atractiva para los capitales y la inversión; entonces el Super IVA, que está atado a tu consumo doméstico, podría tener buenos niveles de recaudación. Y esto ocurre porque la provincia tiene oportunidades para atraer al sector privado, para que se genere inversión privada y después eso vaya al consumo privado.
IN Salta: Hay preocupación en varios sectores por las bajas pronunciadas que hay en el consumo masivo. ¿Cómo se revierte ese proceso?
Damián Di Pace: El camino es así: Baja la inflación, crecimiento de la economía, mejora el salario. El salario es el tercer paso. ¿Y por qué el salario no es el primero? Porque ningún sector de la economía puede distribuir aquello que no produce, aquello que no tiene. Por ejemplo, hoy la industria y el comercio están muy por debajo de la media de crecimiento de la economía. Entonces yo no puedo pagar un mejor salario si no estoy teniendo una buena caja. Si se le exige demasiado al sector empresario terminan cerrando las industrias o los comercios.
Entonces, la economía y el mercado doméstico dependen mucho del resultado eleccionario, porque eso da el nivel de previsibilidad futura. Si nosotros tenemos una agenda reformista, si hacia adelante Salta va a tener un nivel de previsibilidad de baja de Ingresos Brutos, de baja o eliminación de impuestos nacionales, si Argentina va a una reforma laboral donde no tengas una industria de juicio o bloqueos de tu planta, el sector vuelve a recuperar confianza sobre el retorno de la inversión. Eso hace que la economía doméstica, que hoy está cohibida, obturada, crezca en términos reales. Eso se va a dar post octubre, en función del resultado de las elecciones.
IN Salta: ¿Coincidís en que hay que pensar en un nuevo régimen de Coparticipación Federal? Porque hoy 6 de cada 8 pesos que recaudan se los queda la Nación.
Damián Di Pace: Primero, no me gusta mucho el término coparticipación. A mí me gusta más la idea de la competencia entre provincias. Pero es necesario un estadio intermedio de coparticipación. Yo quiero que las provincias compitan, por ejemplo, para atraer el capital privado. Me gustaría que se arme el torneo de captación de inversiones privadas en el Norte del país, a ver quién es el que mejores condiciones genera.
IN Salta: ¿Para eso no crees que hace falta mejores condiciones, por ejemplo, de infraestructura? Por ejemplo, en Salta estamos a más de mil kilómetros del puerto.
Damián Di Pace: Por eso te dije que transicionalmente la coparticipación es necesaria. Es más, yo creo que probablemente el plan Belgrano pueda venir por el capital privado.
IN Salta: ¿Hay estímulos para que eso pase?
Damián Di Pace: Si, hay estímulos, pero también hay cosas raras en el medio. Está claro que no toda la obra pública puede pasar a ser obra privada. Entonces, ahí tenemos que reconsiderar qué es eficiente en obra pública respecto a la privada. No podemos pagar varias veces para hacer una vereda o una ruta, ni darle la licitación a un amigo por política clientelar. La obra pública estaba jodida. Entonces mejoremos esos mecanismos para que a los argentinos no nos roben cada vez que hacemos una obra pública. Y veamos las condiciones para retomar en forma eficiente aquello que se necesita.
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