La clave para aprender está en el juego (así lo aseguran los emprendedores de Anael Planeta)

La propuesta de Raquel Burgos Saavedra y Néstor Javier Yarad, nació junto a su hija. Ser padres los motivó a investigar, descubrir, disfrutar y crear juguetes y juegos para crecer juntos. A través de sus propuestas, que no tienen límites de edades, brindan alternativas que nos permiten ejercitar la mente y compartir entre generaciones.
 

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El emprendimiento Anael Planeta tiene como objetivo acompañar el desarrollo de la infancia y el ejercicio de la mente en todas las etapas de la vida. "Anael Planeta, fue tomando forma de a poco, se trata de un emprendimiento que sostiene el agradecimiento de habernos convertido en papás, por objetivos en común que tenemos los tres y sobre todo el deseo de acompañar el crecimiento de nuestra hija Nadima Anael, con plena presencia. Ella trajo a nuestras vidas movimiento, alegría, amor y por sobre todo magia”, recordó Raquel Burgos Saavedra junto a su compañero de vida, Néstor Javier Yarad.

La experiencia de ser padres, que motivó a Raquel a estudiar psicopedagogía, sumado a la claridad con la que Nadima Anael se vincula con ellos, la magia que se produce y los años de estudio sobre su desarrollo, les generaron tantas emociones, que sintieron la necesidad de compartirlas con los demás mediante juegos lúdicos. Entre sus preferidos se encuentran aquellos que unen generaciones: Torre al cielo, Tiemblanada, las diferentes versiones del Tangram, Tetris, Cubo Soma, son algunos ejemplos.
 


Anael Planeta sostiene un gran deseo, aprender jugando teniendo en claro que jugar no tiene edad sino un objetivo que es ejercitar la mente. “Los juegos inspiran a pensar, crear y recrear, desarrollar la atención, seguir instrucciones, cumplir reglas y así... comprender la convivencia. La rutina del día a día a veces dificulta encontrar momentos para jugar, y me refiero a jugar sin distinción de edades, debido a las responsabilidades del mundo adulto, los compromisos generales, la vida misma. Desde ese concepto jugar termina siendo la última de las prioridades”.

Si consideramos los beneficios que trae el juego, lo tendríamos más presente. “Jugar ayuda a construir lazos más fuertes, da la oportunidad de aprender desde lo más básico hasta la oportunidad de resolver problemas en un marco más relajado. Permite comunicarnos y entender pensamientos, emociones y necesidades de quienes participan en los juegos. Es una excelente alternativa para compartir tiempo de calidad de las diferentes generaciones”, sentenció Raquel.
 


El gran desafío es reconocer que lo importante no es la cantidad de tiempo, sino la calidad de tiempo que se puede ofrecer a quienes se ama para compartir un juego.

Las propuestas de estos grandes emprendedores se encuentran en el Almacén Emprendedor, o a través de las redes sociales @anaelplaneta_juguetes
 

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