En un comunicado que publicó el pasado fin de semana en un diario local, las instituciones representativas del sector de la Construcción en Salta advirtieron sobre cierre de empresas privadas, despidos de personal, alteración de la cadena de pago y cancelación o retraso en la entrega de obras.
En diálogo con IN Salta, el presidente de la Cámara la de Construcción filial Salta, Jorge Banchik, comentó que tuvieron que tomar este curso de acción “después de que la gente de Nación vino a decir que ´estaba todo bien, todo en orden´, cuando evidentemente no es así. Hubo que empezar a enojarse y aclararle a la opinión pública cuál es la real situación de las empresas constructoras en donde venimos ejecutando obras de vivienda y otras obras que tienen valores de abril 2016 y vienen manteniendo el precio sin poder recomponer. Para cumplir con lo pactado las empresas tuvieron que recurrir a créditos o gastar su capital de trabajo para poder terminarlas”, explicó.
“No necesariamente se trata de licitaciones sino de todo tipo de obras de la parte pública cuyos valores fueron establecidos por el decreto 62 del año 2016 que actualizó los contratos y generó una forma de actualización a través de lo que se llamó la (reglamentación) 691. Esto hizo que las empresas empezaran a trabajar a nivel país, porque la obra estaba paralizada, con el compromiso de que Nación actualizaría los contratos a través de estos nuevos decretos. Pero no hubo forma de que eso se concrete. Entonces se ideó el índice UVI, que lo da el Banco Central y se va actualizando mes a mes con el valor de la construcción. Nos pareció claro y transparente y todos adherimos”, recordó.
“Transcurridos dos años, los contratos no han sido actualizados y las constructoras ya no pueden seguir con un quebranto tan grande. La obra pública se está paralizando, al margen de que se evitó parar porque tenemos que proteger a la gente que es el mayor capital nuestro. Pero cumplir con los compromisos necesitas mucho tiempo, necesitas que los proveedores te crean y te permitan diferir el pago. En la solicitada contamos la situación real de las empresas, que están dejando gente sin trabajo, paralizando los ritmos de obra y estamos esperando una señal del Gobierno, que nos den claridad y previsibilidad para poder seguir”, reclamó.
Consultado respecto del ajuste anunciado por Nación, analizó que “siempre los Estados tienen recursos para hacer lo que quieren o deben hacer, pero si van a ajustar que nos digan cómo tenemos que reformular los planes de trabajo para ejecutar las obras. Que nos digan cuál es el camino para poder darle cumplimiento a los compromisos. Hoy los planes de trabajo siguen siendo los mismos. No ha habido recortes, pero las empresas han presentado notas pidiendo la merma en la ejecución de los contratos por la falta de pago de la redeterminaciones”.
Según la UOCRA, la crisis del sector ya le costó el puesto a unos 3.000 empleados y la reducción de las obras fue 50% y en algunos casos alcanzó el 80%, de acuerdo al rubro.
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